Las autoridades estadounidenses detuvieron a un hombre de 36 años del estado de Míchigan que secuestró a una mujer en una situación vulnerable, la agredió sexualmente y traficó con ella durante tres semanas.
Para amenazar a la víctima, el agresor, Michael Barajas, se valió de sus dientes, especialmente modificados para que fueran más afilados, informó este miércoles el alguacil del condado de Genesee, Chris Swanson.
«Barajas la amenazó diciéndole que, si no hacía todo lo que él le ordenaba, le mordería el cuello y le arrancaría la garganta«, señaló Swanson, que calificó de «monstruo» al acusado.
El «monstruo» y su guarida
Según el alguacil, la semana de Acción de Gracias una mujer de unos veinte años en estado de embarazo, que no fue identificada, había sido expulsada de su casa y caminaba por la calle. En ese momento, Barajas vio a la vulnerable víctima y se le acercó en su vehículo para ofrecerle una ducha caliente, comida y cobijo.
La víctima aceptó la oferta pero, al llegar al domicilio de Barajas, este la encerró en una habitación y la ató a una cama con una cuerda. Las ventanas de la habitación estaban atornilladas para que no pudieran abrirse.
Durante el secuestro, el detenido violó en repetidas ocasiones a la víctima y traficó con ella con otros hombres.
La joven intentó escapar en tres ocasiones. En una de ellas salió corriendo por una puerta que quedó abierta, pero Barajas y otros sospechosos la persiguieron, le dispararon y la arrastraron de regreso al dormitorio, precisó Swanson. RT
