Parcelero dijo fue atacado por una turba dirigida personalmente por fiscal Jaime Mota. Un ciudadano de la comunidad Las Minas de Oro, del distrito municipal de El Cedro, denunció ser víctima de la brutalidad policial, tras reclamar que lo dejen trabajar en paz en una parcela propiedad de su familia, que está ocupado ilegalmente por el padre de un fiscal de la provincia de El Seibo.
Elías Jiménez Concepción acusó a Marino Mota de apoderarse de los terrenos de su familia, y que, para hacerle daño, este individuo usa las influencias de un hijo, Jaime Mota, quien es fiscal en El Seibo. De acuerdo con la denuncia formulada por Jiménez Concepción, Jaime Mota, apoyándose en su posición de representante del Ministerio Público usa su influencia para que su padre, Marino Mota, se aproveche de esa coyuntura para pretender despojarle de los terrenos.
Esos terrenos están ubicados dentro del ámbito de la parcela 21, del Distrito Catastral 38/3ra, en el proyecto agrario AC 170, organizado como reforma agraria en el año 1979, durante el gobierno del fenecido presidente Antonio Guzmán Fernández.
Están en el trayecto carretero que conduce a la playa Costa Esmeralda. Jiménez Concepción dijo que tiene en su poder el título otorgado por el IAD y una certificación que lo acredita como dueño de la parcela.
El parcelero dijo haber permanecido 17 años privado de su libertad por un delito que, en todo momento ha reiterado no cometió. Señaló que Marino Mota y su hijo, el fiscal Jaime Mota, aprovecharon que se encontraba en prisión para apoderarse de los terrenos.
Sostuvo que siempre mantuvo esos terrenos sembrados de arroz y coco, pero ahora el invasor Marino Mota lo ha convertido en potrero para sus reses. Dijo que los abusos y atropellos en su contra se están cometiendo, por la influencia del fiscal Jame Mota en la zona.
Denunció que recientemente visitó sus terrenos y que el fiscal Jaime Mota, al enterarse de su presencia en el lugar, envió varios policías a buscarlo preso. Sostuvo que, al salir de sus terrenos, fue detenido por agentes de la Policía, que lo esposaron y lo lanzaron en la cabina de su camioneta como si se tratara de un bulto.
En la Policía (dotación de Miches), dijo que fue maltratado y golpeado por agentes policiales, a pesar de estar esposado. “Estando en el piso tirado, los policías se cansaron de golpearme”, denunció.
Horas después, Jiménez Concepción fue puesto en libertad por órdenes del fiscalizador de Miches, licenciado Jesús María Parra, a solicitud del periodista Pedro Peralta. Jiménez Concepción informó que al ser puesto en libertad se dirigió a su casa, en la comunidad de Las Minas de Oro, y por el simple hecho de pasar frente a la casa de Marino Mota, al otro lado de su acera, en presencia del fiscal Jaime Mota, fue atacado a pedradas por una turba de esa familia, que según declaró, era dirigida por el propio representante del Ministerio Público.
Dijo haber recibido golpes en su espalda, brazo derecho, la pierna y rodilla derecha. El parcelero hizo un llamado a la procuradora Miriam Germán Brito para que ordene una investigación, al considerar que, en un Ministerio Público, Independiente, no pueden ocurrir tantos abusos y maltratos. Igualmente, llamó al presidente Luis Abinader a no permitir maltratos ni abusos policiales porque esa situación está empañando la imagen de su.
