El presidente de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP), reconoció que ya no es posible que la República Dominicana siga teniendo una educación que no responde a las necesidades y expectativas de la población.
El profesor Eduardo Hidalgo dijo que ya eso no es posible, cuando hace nueve años que se está entregando el 4% del Producto Interno Bruto para la educación preuniversitaria, y por lo tanto se cuenta con los recursos económicos y humanos para revertir esa situación.
Sin embargo, el líder magisterial fue enfático en aclarar que la culpa de que no tengamos una educación de calidad no puede ser atribuida única y exclusivamente a los maestros y maestras, como es costumbres de algunos sectores.
Entrevistado por Héctor Herrera Cabral en el programa D´AGENDA, Hidalgo se quejó de que, a veces, cuando se habla de baja calidad de la educación o bajo aprendizaje se mira al maestro como el único responsable, y realmente el profesor es uno de los componentes del sistema.
Agregó que, para conseguir los objetivos deseados en materia de calidad educativa, los padres y tutores de los estudiantes tienen que jugar un rol fundamental, igual que la planificación del sistema por parte de las autoridades gubernamentales.
El educador consideró que esta es una gran oportunidad, y los hallazgos y evidencias que se están presentando representan un desafío pare revertir de manera positiva la situación de la educación dominicana.
Dentro de esa política estatal, el profesor Eduardo Hidalgo dijo que la formación del docente tiene que jugar un rol fundamental.
Sostuvo que el caso de los politécnicos, que sus aulas solo están diseñadas para recibir 30 estudiantes, y recibió un informe donde las autoridades educativas de Santiago están autorizando que se inscriban 45 o 50 alumnos, y parece que eso se está dando en todo el territorio nacional.
Advirtió que con esas condiciones no se puede hablar de calidad de la educación y el aprendizaje, y la misma sobrepoblación estudiantil se da en primaria donde aulas preparadas para 27 alumnos están recibiendo 40, lo que afecta la calidad de vida emocional de los docentes y estudiantes.
Dijo que esa situación se está presentando en el gran Santo Domingo, Santiago, San Cristóbal, y otros grandes centros poblacionales.