El presidente Donald Trump aseguró este viernes que las iglesias y otros lugares de oración son «esenciales» y les pidió a los gobernadores que permitan su reapertura «ahora mismo», o él lo hará por decreto.
«Los gobernadores deben hacer lo correcto y permitir que estos lugares de fe tan importantes y esenciales abran ahora mismo o para este fin de semana. Si no lo hacen, desautorizaré a los gobernadores», dijo el mandatario en una conferencia desde la Casa Blanca.
El mandatario afirmó que este viernes le otorgó la categoría de «esenciales» a todos los lugares de culto y oración del país y que «los ministros, pastores, rabinos y otros líderes religiosos se asegurarán de que sus congregaciones estén seguras mientras se reúnen y oran».