REDACCIÓN .-Un niño de cuatro años rompió accidentalmente Un jarrón de 3,500 años de antigüedad, informó el personal del museo Hecht en Haifa, Israel.
La publicación en redes sociales indica que se trataba de un jarrón de “la Edad del Bronce Media, entre los años 1500-2200 a. C., por lo que se estimó que tenía por lo menos 3,500 años”.
El artículo “está diseñado para almacenar y transportar el consumo local, principalmente vino y aceite de oliva. Además el artículo es típico de la región de Canaán.
A pesar de la gran pérdida histórica, el museo se tomó las cosas con calma y dijo a través de Facebook que hay casos en los que los artículos de exhibición son dañados intencionalmente, y “esos casos son tratados muy seriamente”, incluyendo la participación de la policía.
Sin embargo, aclararon que en este caso el jarrón “fue golpeado por un niño que visitó el museo y el tratamiento de la situación será como corresponde”.
¿Cómo ocurrió el accidente?
El progenitor del infante dijo que el pequeño jaló la vasija porque tenía “curiosidad por lo que había dentro”, lo que provocó su caída, dijo el hombre identificado como Alex a The Guardian.
“Mi reacción inicial fue de negación”, contó Alex. “No podía creer que fue mi hijo quien lo hizo”.
Tras lo sucedido el niño comenzó a llorar, mientras que sus padres anualizaban cuál era la mejor forma de resolver la situación, si recoger los pedazos del jarrón, o dejar que el personal del museo se encargara de ello, por si era posible una restauración más adelante.
“Al principio, estaba en estado de shock”, dijo el padre. “Luego me enfadé un poco con él”.
Luego de que sus padres lograron calmar al niño, avisaron a las autoridades del museo sobre el incidente.
Por el hecho, los directores del museo se mostraron amables invitando a los padres a visitar nuevamente de manera privada.
“El museo no es un mausoleo, sino un lugar vivo, abierto a las familias y accesible”, declaró Rivlin este martes al medio israelí Ynet. “Hacemos un llamado a los padres: No tengan miedo. Estas cosas pasan. Arreglaremos (el jarrón) y lo pondremos en su sitio”, agregó la directora del museo, Inbal Rivlin.