El pitcheo abridor dominicano gozó de un 2017 saludable: Cuatro representantes superaron las 180 entradas de labor, cinco con un WHIP por debajo de 1.30, dos que poncharon más de 200 hombres y un finalista para el premio Cy Young.
Para aspirar a números como esos en 2018 hay un trabajo enorme por hacer, que comenzará a definirse desde el viernes cuando arranquen de forma oficial las ligas del Cactus y la Toronja.
De entrada, a la fecha solo 12 brazos con pasaportes quisqueyanos están “sembrados” para arrancar el curso como titulares. Mientras otros como Francisco Liriano y Ubaldo Jiménez están sin trabajo, los problemas físicos tienen a otro fuera de sus plazas.
Ervin Santana está llamado a ser el cabeza de rotación en Minnesota, pero las mejores proyecciones apuntan que será a finales de abril cuando podrá volver a causa de una lesión en el dedo mayor de su mano derecha, que requirió cirugía.
Michael Pineda (Mellizos) comienza el año en la lista de lesionados por 60 días, mientras concluye la recuperación de la operación Tommy John a la que fue sometido en julio. Edinson Vólquez (Rangers) también se recupera del mismo procedimiento quirúrgico, aunque va más avanzado, pero no está programado que lance este año.
En el Este de la Nacional, solo Richard Ureña y Sandy Alcántara (Marlins) aparecen en las quinielas para subir a las lomitas cada cinco días. En la Central, Carlos Martínez (Cardenales), Luis Castillo (Rojos) e Iván Nova (Piratas) van a la pretemporada a terminar de ponerse en forma, mientras que en el Oeste los Gigantes tendrán a Johnny Cueto y los Padres a Dinelson Lamet y Luis Perdomo.
Del grupo, Severino y Martínez salen como los favoritos para perseguir las 20 victorias y pelear por el premio al mejor lanzador de cada liga.
Pero reglas que permiten relajar las asignaciones a la lista de lesionados por 10 días ha transformado el tradicional esquema de cinco abridores, lo que abre huecos para que los equipos utilicen rotaciones más amplias.
Fuente: NPerez@diariolibre.com

