A partir del siete de enero de 2019, los propietarios de vehículos que tengan tuercas decorativas o puntiagudas correrán el riesgo de ser multados al pago de hasta un salario mínimo por circular en las calles del país con estos elementos instalados.
Así lo establece el Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant) en la resolución 015-2018 que justifica la medida alegando que estas piezas “no representan una necesidad, más bien un elemento decorativo que puede causar daños a terceros y su propiedad”.
La resolución prohíbe el uso, instalación, modificación, aditamento o adaptación de estas piezas.
El Intrant informa que serán los agentes de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett) los encargados de detectar en operativos los vehículos que incumplan con la disposición.
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