El primer asalto transcurrió sin golpes; la ofensiva de los dos rivales estuvo seca en el primer minuto y en el resto hubo más amagos que castigos, el ‘Canelo’ con su gancho de izquierda, Charlo con el ‘jab’.
Charlo, que subió dos divisiones, se cuidó de las embestidas del mexicano, que a partir del segundo asalto le cerró los espacios y lo castigó, sin respeto por la fuerza de los golpes del estadounidense.
Poco a poco Álvarez, con buena velocidad de manos y piernas, aumentó su ventaja en las tarjetas. Cuando Charlo dejó de moverse, el mexicano lo acosó con un gancho puntiagudo al estómago y también castigo con la derecha.
El quinto round fue parejo, con un Jermell que por primera vez dio señales de tener oportunidades de victoria; metió su ‘jab’ y se defendió mejor, lo cual ratificó en el sexto, en el que trabajó bien con la izquierda y mostró buenos impactos de respuesta, aunque Saúl terminó mejor.
Después de acumular ventaja clara en la primera mitad, el tapatío salió a buscar el nocáut, sorprendió a Charlo con un recto de derecha al mentón y obligó al árbitro a hacerle un conteo de protección al rival.
Jermell se recuperó, pero un minuto después el ‘Canelo’ castigó con un gancho de izquierda ante un oponente más preocupado por escapar de los ataques que por ofender.
En el octavo el estadounidense hizo buenos impactos con su golpe recto, combinó bien, pero el daño fue poco. Canelo evitó que su oponente se estableciera en la larga distancia y lo neutralizó.
Bien se vio Jermell en la novena vuelta, en la que lució bien con sus combinaciones, sin embargo, Álvarez volvió a dominar en el décimo, en el que cortó los espacios y dejó sin respuestas a Charlo, que se defendió en los dos asaltos finales del pleito y evitó el nocáut.
«Demostré en 12 asaltos quién es el mejor; soy un tipo fuerte, ese es el ‘Canelo’, no me importa quién será el próximo rival», dijo Álvarez en inglés para luego rematar en español: «Viva México, cabrones».