Ocho cadáveres fueron encontrados en lo que parecía ser una fosa clandestina en los suburbios de Río de Janeiro, dijeron el miércoles las autoridades, que señalaron que algunos estaban desmembrados.
Los fiscales del estado de Río dijeron creer que los cuerpos corresponden a víctimas de grupos paramilitares que actúan en la zona, a unos 30 kilómetros (18 millas) al norte del centro de la ciudad.
El sitio fue encontrado después de recibir un aviso anónimo en el que se indicó que los cadáveres eran responsabilidad del grupo paramilitar Milicia Nueva Aurora, agregaron.
Dijeron que uno de los líderes del grupo fue arrestado la semana pasada bajo cargos de homicidio. Las autoridades locales calculan que los grupos delictivos controlan alrededor de una cuarta parte del territorio del estado de Río de Janeiro.
Expertos en seguridad aseguran que esos grupos han estado involucrándose cada vez más en actividades de extorsión, negocios ilícitos y homicidios. El presidente derechista Jair Bolsonaro ha prometido combatir la epidemia de violencia.
